Pero no siempre es tu cliente.
A menudo escuchamos esta frase como una verdad absoluta, pero en realidad la clave está en elegir bien a quién decides servir.
💬 Sí, el cliente tiene razón…
...cuando sabe lo que quiere, valora el trabajo que hay detrás, está dispuesto a aprender y entiende que los resultados requieren compromiso.
❌ El problema no es el cliente “difícil”.
El verdadero error es aceptar a un cliente que no está preparado, que no valora el proceso o espera magia sin esfuerzo.
📌 No se trata de juzgar.
Se trata de reconocer que hay perfiles que aún no están listos para el servicio que ofreces, y eso también es profesionalismo: saber decir “no” a tiempo.
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Forma parte del éxito de tu cliente, pero no te conviertas en rehén de sus expectativas mal planteadas.
Porque sí, el cliente siempre tiene razón…
cuando el profesional también tiene claro a quién quiere ayudar.
